Así que no era sólo percepción

Todos lo sabíamos, Mancera mentía. ¿Cómo era posible que a pesar de que fuéramos víctimas del delito, el Jefe de Gobierno nos dijera que era percepción de la ciudadanía? Pues, maquillando las cifras…


El maquillaje en delitos de alto impacto fue de 24,026, es decir, fueron clasificados mal o como denuncia de hechos. La auditoria federal realizada por El Centro Nacional de Información del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (CNI-SESNSP), trae datos verdaderamente preocupantes.

La gravedad del problema es debido a que los malos diagnósticos durante el gobierno del ahora Senador por Chiapas, Miguel Ángel Mancera, permitió el avance de la delincuencia organizada.


No es ninguna disculpa para el gobierno actual, la delincuencia sigue creciendo y parece que la estrategia en seguridad va lenta. Pero no estaría mal llamar a una rendición de cuentas al Senador Mancera.


Son 106 personas del gobierno anterior las que están siendo investigadas

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Reforma

Van tras «maquilladores» de cifras

Cristina Hernández

Cd. de México  (24 julio 2019).- Una auditoría federal determinó que la anterior administración capitalina «maquilló» 24 mil carpetas de investigación de alto impacto del año 2018.

El Centro Nacional de Información del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (CNI-SESNSP) ordenó una auditoría de los 194 mil 479 expedientes iniciados en la CDMX ese año.

En el análisis participaron especialistas de la ONU como observadores.

Los resultados arrojaron que los delitos de alto impacto pasaron de 32 mil 506 a 56 mil 532, es decir, 24 mil 26 delitos fueron clasificados mal o como denuncia de hechos.

En su momento esto representó para las autoridades capitalinas una disminución en la incidencia delictiva de alto impacto.Con el ajuste de la auditoría, estos delitos pasaron de un promedio diario de 89 a 155.

En el análisis se reveló que los delitos de bajo impacto tuvieron una reducción del 8.7 por ciento al cambiar de 202 mil 168 a 184 mil 498.

Por lo que respecta a los delitos del fuero común, tuvieron un aumento del 2.7 porcentual, al ir de los 234 mil 674 a 241 mil 30.

Por estas alteraciones, la Procuraduría capitalina abrió una investigación y el SESNSP deberá interponer la denuncia ante la Fiscalía General de la República por el delito de ejercicio indebido del Servicio Público.

Durante el periodo examinado, la Dirección General de Política y Estadística estaba a cargo de César Martínez Jasso, y dependía de manera directa del entonces Procurador Edmundo Garrido.

La investigadora Ana Laura Magaloni alertó que maquillar las cifras oculta la gravedad del problema.
La docente del Centro de Investigación y Docencia Económicas (CIDE) y especialista en temas de justicia penal, señaló que el ocultar la verdaderas estadísticas del delito afecta al dimensionar la situación y la medición del problema.

A principios de año, la Procuradora Ernestina Godoy advirtió que la anterior administración (en las jefaturas de Gobierno de Miguel Ángel Mancera y José Ramón Amieva) los delitos de alto impacto habían sido mal clasificados.

«Cuando alteran el número de carpetas, lo que están alterando es la gravedad del problema de seguridad y eso es muy delicado; si tú piensas que hay dos homicidios, pero en realidad hay seis, pues estás ante un fenómeno distinto del que dice la autoridad que está pasando» alertó Magaloni.

«Es afectar el diagnóstico sobre el problema y la dimensión del problema de seguridad, porque hasta hoy medimos de esa manera el problema», señaló.

Entre los delitos que tuvieron cambios más drásticos entre los números reportados en el 2018 y la incidencia real está el robo a pasajero en el Metro, que pasó de los 904 casos a 4 mil 586.

El robo a transeúnte en vía pública fue de 9 mil 576 a 24 mil 238, es decir, tuvo un aumento del 153.1 por ciento, mientras que la violación tuvo una variación porcentual de 104.8 por ciento, al pasar de 682 a mil 397.

Otros delitos con incrementos después de la revisión fueron el robo a negocio con violencia, que fue de 3 mil 16 a 4 mil 562.

«Para que pudieran alterar la cifras, también alteran otro montón de cosas: la carpeta de investigación, la denuncia.

«Y realmente no le puedes dar seguimiento de dónde está físicamente esa carpeta o qué ha pasado con ella, y eso genera unos márgenes de discrecionalidad que dan espacios a corrupción y arbitrariedad», agregó la especialista.

El 15 de julio, el CNI-SESNSP informó la validación de las cifras que habían sido mal clasificadas y días después publicó en su portal los ajustes de la incidencia delictiva.

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