La pandemia hace reflexionar sobre la densificación de la ciudad

El Atlas de Riesgo mide el riesgo y los peligros y uno de ellos es la pandemia. Así como el sismo de 2017 nos vino a recordar la vulnerabilidad que tenemos por vivir en una zona sísmica, la pandemia  está demostrando la fragilidad del ser humano y las deficientes políticas públicas de salud por la falta de visión de prevención.

La primera pregunta al comenzar a vivir el confinamiento fue el abastecimiento de agua a todas las viviendas de esta ciudad. Una medida primordial para el combate al COVID-19 es lavarse las manos constantemente. ¿Tendrá la ciudad la suficiente agua para todos?

Por otro lado, la política de densificación de la ciudad ante un evento como este es cuestionable. ¿Cómo guardar sana distancia? El transporte público resulta ser una zona de alto contagio, millones de personas se mueven en el Metro diariamente y no es precisamente en viajes cómodos y sin aglomeración. ¿Cómo se evitará el contagio?

Parece que la Teoría de vivir hacinados pero todos en la zona centrica, no había contemplado la pandemia. No cabe duda, que todos los días se aprende algo nuevo.

Reforma

Plantean revisar desarrollo urbano

Israel Ortega

Cd. de México  (07 junio 2020).- Rafael Valdivia, experto en Urbanismo y Planeación, señaló que es necesario revisar las políticas de desarrollo inmobiliario en la Ciudad de México ante la pandemia de Covid-19 en aspectos de planeación y de impacto económico.

En entrevista, Valdivia explicó que el sector de producción de vivienda atraviesa por una situación desfavorable, que se agudizará por los problemas económicos y el desempleo y señaló que es posible que desde la planeación urbana puedan definirse lineamientos, que puedan ayudar a la contención de los contagios en el futuro.

«La posible producción de vivienda que se tenga o la que exista tendría que vigilarse a través de instrumentación de procesos de planeación que ayuden, como se ha discutido en otros lugares del mundo, que ayuden en la contención de la pandemia en las áreas urbanas altamente densas», explicó el también presidente de Foropolis.

Ante esto, el especialista sugirió revisar si proyectos, como el que recientemente anunció que retomará el Gobierno de la Ciudad, de 12 corredores inmobiliarios en los que se prevé la creación de hasta 10 mil viviendas, generarán o no condiciones propicias para los habitantes de contagiarse al incrementar la densidad de algunas zonas.

«En el caso específico de los corredores urbanos de la Ciudad de México estos tendrían que ser revisados a la luz de los nuevos acontecimientos de la pandemia», expuso.

Para el análisis de casos como estos, agregó el especialista, es posible implementar un índice de vitalidad urbana donde se analicen factores como la densidad y espacios públicos de las zonas.

«La densidad poblacional dentro de las áreas urbanas puede tener efectos negativos hacia los índices de propagación, ciudades o zonas urbanas cuyas densidades promedio estén dentro de los 300 o 400 habitantes por hectárea son más vulnerables a las zonas metropolitanas que tienen por debajo de los 200 habitantes por hectárea», agregó.

«Tendríamos que buscar ciertos equilibrios territoriales puntuales para cada Ciudad e identificar cuáles son las zonas ya con detalle en términos de la densidad habitacional por hectárea».

El especialista añadió que desde finales de mayo y hasta julio, expertos se reunirán en un foro virtual denominado «Hacia un nuevo debate en la Política Urbana ante la disrupción del Covid-19» , para analizar los problemas y soluciones para el sector que plantea la pandemia.